CANCÚN, Quintana Roo.- Gerardo Solís Barreto, presidente honorario de la defensoría internacional de Derechos Humanos, dio a conocer la devastación de vegetación nativa en 45 hectáreas en dos predios ubicados en Punta Nizuc, ubicados entre los kilómetros 23 y 24 de la zona hotelera, donde se construirá el complejo Alai, que constará de siete torres y que desarrollará la empresa Pulso Inmobiliario, según anunció el despacho británico Zaha Hadid Architects.
En el terreno, que abarca poco más 20 hectáreas, los edificios ofrecerán 12 tipos distintos de departamentos, así como las instalaciones para el deporte, el ocio y el bienestar, comparten una plataforma elevada para que, en primer lugar, la luz natural llegue al suelo y permita que la vegetación tropical crezca hacia arriba y en segundo lugar, la fauna local podrá cruzar el sitio sin ningún obstáculo, explica un comunicado del despacho.
El complejo también tendrá business center, cine y ascensores de alta velocidad, entre otras amenidades, de acuerdo con la página oficial del desarrollo.
Las paredes exteriores son acristaladas en cada departamento y se abren a grandes balcones privados con vistas al mar Caribe o a la laguna de Nichupté, conectando a cada residencia con el entorno y maximizando los vientos alisios de la región para lograr una ventilación natural.
MANIFESTACIÓN
Con pancartas en mano y apoyados por integrantes de otros grupos de ambientalistas, el litigante comentó queno se sabe de quienes son estos predios y que ya se interpusieron dos demandas: una ante la Procuraduría General de la República (PGR) y la otra en la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), para que investiguen si los presuntos propietarios de los predios cuentan con todos los permisos correspondientes o en caso dado detener las obras que se realizan y sancionar a los responsables.
“Esta manifestación se hace para proteger el manglar, invitamos a la población a que se sume, ya hay dos denuncias presentadas y la idea es hacer un llamado a la sociedad para que no sea indiferente ante los ecocidios que pasan en la ciudad y en el estado”, afirmó.
Aseveró que hay un abuso de los empresarios, en donde en el sexenio de Roberto Borge tuvieron impunidad, ya que apoyó a todos sus amigos, quienes sacaron permisos a modos y la autoridad se volvió cómplice de los que llamó devastadores.
Ahondó que los constructores se aprovechan, ya que ponen mallas verdes en los predios y “no se ve qué es lo que hacen, porque saben que el predio en donde rellenan es manglar”.
Precisó que está el artículo 60 TER, norma 052, 022, artículos 420 BIS de la Ley Federal de Vida Silvestre en donde dice que el Mangle es intocable y en estos sitios hay relleno.
RESPONSABLES
“Sea quien sea (el empresario que devastó el mangle), no importa, no se vale lo que hacen; esto no se puede permitir, Cancún ya puso un referente a nivel nacional en donde la sociedad quiere cuidar sus recursos naturales”, aseveró.
Recalcó que en los dos predios son aproximadamente 45 hectáreas en los que hay afectación, no se sabe de quienes son y apenas les dieron la información e incluso hay maquinaria trabajando en ellos.
También en uno de los predios se encontró a personal de la empresa responsable de la obra y no supieron dar referencia de quién los contrató, sino que solamente de limitaron a llamar a su “jefe” y tomar fotos a los ecologistas y medios que cubrieron esa información. (QUINTANA ROO HOY/Renán Moguel)
