CANCÚN, Q. Roo.- La Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados (Canirac) de Cancún reporta 30% de caída en la afluencia de comensales durante enero y la primera quincena de febrero por la conjugación de diversos factores, del que destaca el recrudecimiento de los hechos de violencia en la ciudad, mientras que en Playa del Carmen por esta misma causa han cerrado ya dos establecimientos de gran tradición en la Quinta Avenida.
Juan Pablo Aguirre de la Torre, presidente recién electo de Canirac-Cancún, explicó que la disminución de 30% que están viviendo es respecto a las expectativas de ventas que tenían para el primer bimestre de 2017, pues aunque ya se sabía que sería un arranque de año difícil, en Cancún la temporada invernal con ocupaciones arriba de 70% durante enero y febrero les habría permitido en condiciones normales un mayor flujo de clientes.
Causas
Sin embargo, las balaceras en el centro de la ciudad en contra de la Vicefiscalía General de Quintana Roo, así como otras noticias similares desde que arrancó el año han logrado atemorizar a las personas, dando como resultado un palpable descenso en la actividad nocturna de la ciudad.
A ello hay que añadirle, dijo, los incrementos en combustibles y energía eléctrica, así como la caída en el consumo de la población derivado de la incertidumbre económica, además de que los insumos básicos de restaurantes se han incrementado en 7%, sin contar con que los productos importados también han incrementado su costo en la misma proporción en la que el peso ha ido perdiendo terreno frente al dólar, por lo que desde la segunda quincena de enero el empresario restaurantero ha tenido que reflejar esas alzas en el costo de los platillos, explicó.
Explicó que el mayor impacto por la baja de comensales se ha vivido en el centro de la ciudad, pues los restaurantes de la zona hotelera tienen otro mercado. (Jesús Vázquez / QUINTANA ROO HOY)
