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4 mayo, 2024

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Mimenza, cada vez peor

Hay individuos que disfrutan de llamar la atención y sentirse importantes, sujetos que son capaces de llegar a cualquier extremo con la intención de aparecer en los medios y conservar la “fama” que han logrado. Carlos Mimenza es uno de ellos.
Preocupa que ya no conoce límites, preocupa que ya le da lo mismo insultar al gobernador del estado que a las autoridades federales, porque entonces qué podemos esperar los ciudadanos de a pie de un individuo que ya ha dejado claro que no respeta las instituciones.
En lo personal ya me tocó ser víctima de sus amenazas, que lanzó contra mí y mi familia, contra mis hijos que son menores de edad. De un sujeto que no conoce límites puede esperarse cualquier cosa.
Tras un periodo de inactividad en redes sociales y cuando ya la sociedad estaba olvidándolo, este fin de semana aseguró haber sido víctima de un atentado contra su vida mientras circulaba por la carretera federal Playa del Carmen- Carrillo Puerto.
Pero desde un principio su explicación dejó serias dudas, porque había muchas cosas que no cuadraban. Sin embargo, lejos de apreciaciones personales, le mostraré a usted que es lo que dicen los peritos especialistas. Con base a los resultados del método de estudio realizado y de las consideraciones criminalísticas expuestas se puede definir que: con base en las características físicas y morfológicas de los orificios de entrada de la unidad automotora sujeta a estudio, se concluye que dichos daños tienen características como los ocasionados por proyectiles únicos disparados por arma de fuego, así como por lo señalado en las consideraciones de la presente opinión técnica.
Los orificios circulares, descritos tienen la modalidad de entrada, por lo que se puede establecer que los proyectiles disparados siguieron una trayectoria de afuera hacia adentro de izquierda a derecha, con una incidencia ligeramente de arriba hacia abajo.
Por las características físicas de los daños e incidencias de los orificios, el posible tirador se encontraba de frente a la puerta del conductor de pie o en un vehículo automotor de mayor tamaño al afectado, pero nunca en movimiento.
Como datos clínicos médicos se puede observar que la persona que aparece en el video presenta una posible dislalia y disartria que se escucha cuando arrastra la lengua y la voz durante su argumento, debido a dos causas probables: la primera por ingesta de alcohol y la segunda por un posible estrés.
Se puede observar que se muestra tambaleante en los primeros y últimos segundos, así como realiza una corrección en la fecha refiriéndose al mes agosto e inmediatamente al mes de septiembre, eso demuestra una posible desorientación en tiempo, situación que puede deberse a las causas mencionadas en el párrafo anterior. De acuerdo con el comportamiento no se observan datos aparentes que nos pudieran advertir una posible intoxicación por estupefacientes.
Como datos clínicos psicológicos se observa al individuo en actitud retadora ante el evento haciendo aseveraciones delicadas y graves sin fundamento, en actitud de impotencia, enojo eufórico, rabia, cólera mismos que se asocian más con temperamento colérico-explosivo (carácter en la persona) poco regulado ante situaciones que no forman parte de la vida diaria; es decir poca tolerancia a la frustración.
No presenta rasgos de un estado de shock asociados a un evento traumático, como podrían ser: tartamudeo, desubicación, bloqueo mental, temor, angustia y preocupación profunda. Presenta movimientos físicos irregulares: movimiento ocular letargado (parpadeo lento) y resequedad de la boca.

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