CIUDAD DE MÉXICO.- Apenas en diciembre pasado la periodista Tere Vale presentó en México el libro biográfico Una vida de telenovela, el cual reseña la vida del creador de la telenovela rosa, Valentín Pimstein, quien el día de ayer falleció a los 91 años de edad, víctima de un paro cardiaco en su natal Santiago de Chile.
En aquella ocasión Valentín Pimstein ya no pudo viajar a México para la presentación del libro, por lo delicado de su salud; solo su esposa, Victoria Ratinoff, y su hija, Verónica, estuvieron en el evento.
A Valentín Pimstein no solo se le consideró como uno de los más importantes productores de telenovelas en América Latina, sino también el responsable de que muchas actrices como Verónica Castro, Lucía Méndez, Victoria Ruffo, Thalía, Angélica Aragón, Edith González y Lucero, se consolidaran en el gusto del público, por la proyección internacional que les dieron los personajes impuestos por Pimstein en melodramas como El amor tiene cara de mujer, Mundo de juguete, Rina, Los ricos también lloran, Viviana, Colorina, La Fiera, Simplemente María, Vanessa, Chispita, Bianca Vidal, Rosa salvaje y Carrusel, entre otras muchas más.
Nacido en agosto de 1925, en Chile, donde tuvo una breve trayectoria en la producción de películas, llegó a México a principios de los años 60 para incursionar en la televisión por invitación de Emilio Azcárraga Milmo.
A través de la mente creativa de Pimstein se impusieron las ideas de las eternas historias de amor, en las que la joven pobre se enamoraba del hombre rico y surgía el triángulo amoroso con una tercera en discordia, pero donde al final ganaba la bondad, la honestidad y el amor entre los protagonistas.
Aunque también fue el único productor de la televisión capaz de matar a la protagonista en medio del éxito de un melodrama. Esto sucedió con Lucía Méndez en Vanessa.(Edmundo Pérez / AGENCIA BASTA!)
